Un seguro de impago de alquiler, en el mundo del alquiler de inmuebles, es básicamente tu mejor aliado para proteger tu inversión y tu flujo de caja. Imagina que el inquilino deja de pagar—no es solo molesto, es un problema serio para tus cuentas. Para eso sirve este seguro: te cubre las espaldas y mantiene tu negocio en marcha.

¿Qué cubre exactamente? 

Primero, si el inquilino se retrasa o directamente deja de pagar, la aseguradora se encarga de abonar esas rentas pendientes (normalmente a partir del segundo mes de impago). Eso sí, hay límites: por lo general, hasta 12 meses de alquiler.

Después está la parte legal, que puede volverse un auténtico dolor de cabeza. El seguro incluye defensa jurídica, gestión del proceso judicial y hasta los costes de abogados y trámites, si tienes que llegar al desahucio. Así puedes centrarte en tu negocio, no en juicios interminables.

Si además el inquilino deja la propiedad en mal estado—más allá de lo habitual por uso—algunas pólizas también cubren esos desperfectos. Así, evitas pérdidas inesperadas al final del contrato.

No solo eso: hay servicios adicionales como informes de solvencia del inquilino antes de firmar el contrato, que ayudan a filtrar a los candidatos con más garantías. También ofrecen asesoría jurídica para resolver cualquier duda contractual. Todo pensado para que tomes decisiones informadas y minimices riesgos.

¿Por qué contratarlo? Básicamente, por tranquilidad financiera: aseguras el cobro, aunque el inquilino no cumpla. Además, la gestión profesional del seguro te ahorra tiempo y recursos. Y si eliges una póliza que exige inquilinos solventes, el nivel de riesgo baja desde el principio.

¿El coste? Suele situarse entre el 3% y el 5% de la renta anual. Por ejemplo, para un alquiler de 800€ al mes, el seguro puede costar entre 288€ y 480€ al año. Es un gasto razonable si lo comparas con el valor de mantener ingresos estables y evitar problemas legales.

En definitiva, para propietarios que quieren profesionalizar la gestión de sus activos y evitar sorpresas desagradables, el seguro de impago de alquiler es una inversión que aporta seguridad, ahorro de tiempo y protección ante imprevistos.