Masía Arenys de l’Empordà

En el corazón del Empordà, entre los pintorescos márgenes del caudaloso río Fluvià y a pocos pasos del castillo medieval de Arenys, se encuentra una finca única con una gran historia: la masía «Arenys de l’Empordà». No es simplemente una casa, sino un lugar donde se entrelazan la historia, el arte y la naturaleza.

Construida en 1877 por encargo de José Serra, conquistador español y emigrante que regresó de Cuba, la propiedad se convirtió en una joya arquitectónica del estilo ecléctico, combinando lo mejor de las corrientes del siglo XIX. Años más tarde, fue el hogar de la célebre bailarina catalana Àurea de Sarra, quien, tras una carrera internacional, eligió esta finca como su lugar de retiro junto a su esposo, el reconocido crítico de arte José Francés.

Hoy, la casa principal de 487 m² requiere restauración, pero mantiene su imponente presencia y elementos arquitectónicos únicos:

• Fachada simétrica con entrada monumental y arco de piedra natural;
• Balcones forjados, grandes ventanales y galería cubierta con terraza;
• Torre central con vistas panorámicas y tejado de teja a cuatro aguas;
• Escalera de piedra que desciende hasta el antiguo embarcadero privado en el río.

La finca se asienta sobre un terreno de 14 hectáreas, que incluye:

• Tierras de ribera y praderas;
• Zonas boscosas con fresnos, alisos y chopos;
• Linde directo con el río Fluvià, donde recientemente han regresado las nutrias;
• Jardín histórico con fuente y estanque, que aún conserva su trazado original.

Infraestructura existente:

• Garaje-almacén de 120 m²;
• Dos casas para el personal (de 40–50 m² cada una);
• Posibilidad de ampliar la casa principal en 150 m² adicionales;
• Opción de instalar casas modulares ecológicas desmontables.

Los terrenos están clasificados como agrícolas y forestales, ideales para proyectos de agricultura sostenible, turismo rural o centro de retiros privados.

Características destacadas:

• Máxima privacidad y entorno natural;
• Acceso directo al río (perfecto para pesca, kayak y actividades acuáticas);
• Gran valor cultural e histórico;
• Oportunidad de rehabilitación con alto potencial de revalorización.

Además, la finca cuenta con permiso concedido para explotación como hotel rural (turismo rural), lo que la convierte en una excelente oportunidad de inversión para:

• Hotel boutique con historia propia;
• Centro de retiros;
• Espacio para eventos, bodas, seminarios o residencias artísticas;
• Complejo agro-turístico de lujo.

Arenys de l’Empordà no es solo una propiedad — es la posibilidad de dar nueva vida a una obra maestra olvidada, construyendo el futuro con respeto al pasado.